Marian S.

En la práctica de Feldenkrais con Pablo Jurado comprendí la nueva dimensión que este método aporta tanto en lo corporal como en el camino interior de consciencia, he ido aprendiendo un camino de escucha interior a través de las mil formas que se van proponiendo en cada lección para transitar lo no transitado, tanto en el aspecto corporal como en el de consciencia.

Aparte de lo extenso y profundo de su conocimiento del Método Feldenkrais, Pablo brinda la visión que le ha aportado su propio camino interior, su propia experiencia, y desde ahí puede comprender y enmarcar el obstáculo particular al que se esté enfrentando el alumno, dando recursos para su abordaje.

Sus instrucciones son precisas e inspiradoras, llenas de entusiasmo y creatividad. Todo lo dicho, junto a su generosidad en responder dudas brindando todo su bagaje, su atención abierta al alumno adaptándose a cada situación, hacen que uno sienta a Pablo también compañero aparte de como maestro.

Estrella L.

Recuerdo la primera vez que descubrí el Método Feldenkrais, que fue con Pablo Jurado. Fue en un retiro, donde él lo ofreció como actividad. Media hora donde quedé maravillada del cambio en mi cuerpo , un antes y un después, simplemente con la guía que él iba sugiriendo tan sutil y alineada al momento y moviendo la atención, la magia. Gracias Pablo

Patricia G.

En una sesión de Feldenkrais me gustan las preguntas abiertas que lanzan sobre mi movimiento, mi postura, mis sensaciones corporales. Hacen que me convierta en una investigadora minuciosa de mi cuerpo para responderlas. Así que no intento imitar un ejercicio a la perfección, si no que presto atención a lo que la propuesta moviliza en mi cuerpo.

Pausadamente se fragmenta el movimiento en unidades pequeñas, lo que me permite conocer y experimentar los músculos, las articulaciones y la energía que participan en un movimiento y de los cuales normalmente no soy consciente.

Por un lado, he descubierto como en un movimiento sencillo participa la totalidad de mi cuerpo y por otro, como en algunos movimientos utilizo energía, músculos, articulaciones,... que no son necesarios y hacen que el movimiento resulte artificial e incómodo.

Después de una sesión de Feldenkrais me siento sensible, receptiva y con fluidez.

Elisa S.

Trabajar con Pablo para mí siempre ha sido una experiencia de apertura y oportunidad para conectar conmigo misma. Sabe crear el espacio adecuado para que cada clase camine y se adapte a las necesidades de cada uno/a, del grupo, del momento partiendo del respeto profundo a uno mismo

Las clases del método Feldenkrais siempre son especiales, variadas y guiadas con gran riqueza, lo que me permite explorar en mí misma con mucha atención. Me siento invitada y guiada a entrar de manera progresiva y cuidadosa en cada movimiento o dinámica.

El trabajo corporal integral, aúna y plasma su saber y experiencia en múltiples disciplinas; son clases muy completas, investigadas, bien pensadas, preparadas y fluyen con naturalidad y claridad.

Pablo es muy generoso e implicado en sus clases, sabe aderezarlas con humor, cariño, naturalidad, espontaneidad, creatividad y gran atención y presencia. Cualidades que hacen cada clase especial y que me invitan a encontrarlas en mí misma

Le estoy profundamente agradecida.

Marina E.

Cada vez que he asistido a un taller o clase de Pablo me ha resultado sugerente, didáctico y renovador. La manera en que transmite su experiencia y su comprensión del ser humano es cálida, profunda y liberadora, favoreciendo que cada uno de nosotros podamos conectar con nuestra sabiduría interna, más allá del intelecto...

Pierre M.

Hola, me llamo Pierre, soy profesor de Chi Kung y he tenido la suerte de haber conocido a Pablo y practicado durante bastante tiempo el método o proceso metodológico de Feldenkrais. Puedo decir que me ha aportado mucho enriquecimiento personal dentro de mi autoconocimiento corporal, así como la visión y práctica de trascender mis propios movimientos dentro de la disciplina y técnica del Chi Kung, aportándome nuevas formas de sentir y disfrutar de éste.

Sobre Pablo solamente añadir algunas palabras sobre lo que me ha transmitido su persona en el tiempo que hemos compartido: sensibilidad, generosidad, serenidad y sabiduría. Gracias por todo.

Isabel G.

Conocí a Pablo y las distintas modalidades de su trabajo, método feldenkrais, cuerpo y voz, yoga, meditación... hace más de seis años.

Desde el principio quedé enamorada de su propuesta en las distintas disciplinas, de la sensación de bienestar y coherencia física y mental que descubro tras la práctica.

Me ha ayudado a comprenderme, a ser paciente y amable con los estados físicos y emocionales que se me van presentando, mejorar mi relación con mi cuerpo y a disfrutar de todas las posibilidades de movimiento que me ofrece y me desvela la práctica,

Estoy agradecida

Alicia C.

Fisioterapeuta. 40 años. Experta en reeducación postural y técnicas miofasciales.

Por mi profesión había probado diversas disciplinas para abordar la consciencia corporal y la reeducación. Feldenkrais me ofreción una experiencia única donde el movimiento es secundario y prima la sensación e idea de movimiento. Descubrí la revolución de cambiar mi forma de estar de pie sólo con imaginar que movía mi cuerpo.

Conocer y practicar con Pablo fue un paso más hacia el respeto máximo hacia el cuerpo, sin dolor, sin esfuerzo, con placer. Una revolución.

Ainhoa G.

Me encantan las clases. El trabajo que se hace es variado, dinámico y mueve el cuerpo en su totalidad. Además la forma de guiar de Pablo es genial, tiene una forma de transmitir precisa, creativa y amable. Siento que estas clases son una herramienta valiosa, de cuidado y bienestar.